Reacciones alérgicas a Nurofen en niños
Nurofen es un atipiretico basado en ibuprofeno que a menudo se prescribe a niños con fiebre, combate además, eficazmente la fiebre que acompaña los Síndromes Respiratorios Agudos y Graves (SRAG), gripe u otras infecciones. Adicionalmente, este medicamento ayuda a eliminar o mitigar dolores ejemplo, en la garganta con amigdalitis o en las articulaciones después de un trauma.
Generalmente, para el tratamiento en niños, se utiliza Nurofen en suspensión, con sabor a fresas o naranja que está permitido a partir de los 3 meses de edad y puede usarse en pacientes jóvenes menores de 12 años. Como regla general, los niños toman un jarabe agradable sin problemas, y es muy fácil dosificarlo usando una jeringa de medición especial.
Para los más pequeños, Nurofen se presenta en forma de supositorios, la forma más conveniente para bebés. Los pacientes que ya tienen 6 años pueden tomar Nurofen en tabletas, que contiene 200 mg de ibuprofeno en cada pastilla.
Como con cualquier otro medicamento, pueden producirse reacciones alérgicas al Nurofen. ¿Cómo identificar si su niño tiene una reacción alérgica?, ¿Por qué aparece y cómo actuar si los componentes de los supositorios, suspensiones o tabletas se han convertido en un alérgeno peligroso para su niño?.
¿Cómo se presenta la alergia a Nurofen?
La reacción negativa a la toma de un medicamento antipirético, que resultó ser alérgeno, puede desarrollarse lenta o muy rápidamente. Por lo general se evidencia por la aparición de síntomas como:
- Sarpullido, áreas de enrojecimiento, parches escamosos, picazón y otros cambios en la piel.
- Disnea y tos seca, que surgen de ataques debidos a laringosis o broncoespasmo.
- Diarrea, hinchazón, dolor en el estómago y otras manifestaciones de irritación del tracto digestivo.
- Dolores de cabeza o mareos.
Estos síntomas pueden manifestarse y desaparecen después de algunas horas por sí mismos, pero con frecuencia persisten durante un par de días incomodando al niño, lo que requerirá que se aplique tratamiento.
Una de las manifestaciones más frecuentes de alergia a Nurofen es una reacción cutánea en forma de dermatitis. Los parches con comezón, manchas rojas o erupciones aparecen en el abdomen, las manos, la cara y otras partes del cuerpo del niño. Pueden ser pequeñas o diseminarse rápidamente por el cuerpo y formar grandes manchas de inflamación.
En algunos casos excepcionales, tomar Nurofen puede provocar una reacción inmediata de shock anafiláctico, que puede ser peligrosa para la salud y la vida del niño.
Esto puede suceder con el uso repetido de la droga, aun cuando la primera ingesta del medicamento efectivamente bajó la temperatura y eliminó el dolor, y no tuvo ningún efecto secundario.
Puede ser que con la primera ingesta hubo sensibilización del cuerpo y cada uso posterior de Nurofen para el niño puede desencadenar reacciones alérgicas peligrosas, con síntomas como:
- Edema del Quincke.
- Urticaria.
- Shock anafiláctico.
Estas formas de alergias pueden afectar la respiración, las pulsaciones y otras funciones importantes del cuerpo del niño, que requieren atención médica inmediata porque amenazan la vida del niño.
Causas de una reacción alérgica
El cuerpo del niño puede responder con síntomas de alergia:
- El componente principal de Nurofen, que es ibuprofeno. En este caso, la reacción ocurrirá cuando se use cualquier forma del medicamento, así como cualquiera de los análogos con el mismo ingrediente activo. En algunos casos, alérgico al ibuprofeno, al niño no se le deben administrar otros medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (existe una alergia cruzada).
- Para sustancias adicionales. Esta reacción generalmente ocurre cuando se usa una suspensión o tableta, y las velas no se provocan, ya que no contienen compuestos químicos dañinos (solo se agregan grasas sólidas a su composición de ibuprofeno). En tal situación, a un niño se le pueden administrar supositorios, y si tiene más de dos años, se debe seleccionar un análogo en el que no haya compuesto que provoque alergias.
La aparición de alergias a Nurofen y otras drogas puede contribuir a varios factores, entre los cuales:
- ARI frecuente y prolongado.
- Enfermedades alérgicas en parientes cercanos del niño.
- Reacción negativa a los alimentos, polen, polvo y otros alérgenos.
- La terminación temprana de la lactancia materna.
- Abuso de medicinas.
- Anomalías inflamatorias del tracto gastrointestinal o disbiosis.
Además, una reacción que recuerda a la alergia puede ser causada por el exceso de dosificación del medicamento y la ingesta simultánea de otros medicamentos, por lo que no se recomienda administrar ningún medicamento a los niños sin consultar a un médico.
Cómo se debe actuar después de administrar Nurofen
Si después de la primera aplicación de Nurofen o unos días después del comienzo del tratamiento con tal remedio, el niño tiene algún síntoma negativo, es importante dejar de darle el medicamento inmediatamente. Incluso si los padres tienen dudas de que es una alergia, la medicación aún debe ser cancelada, y el médico debe ser informado de la aparición de cualquier dolencia.
Con una reacción negativa al supositorio, se recomienda que se realicen microclysters para eliminar el medicamento del intestino más rápidamente. Si Nurofen se tomó por la boca, se aconseja al paciente que administre sorbente, por ejemplo, Enterosgel. Con una reacción cutánea, a menudo se recetan remedios locales, por ejemplo, gel Fenistil.
Para los niños con alergias a Nurofen, dependiendo de la gravedad de la reacción y la edad, recetan antihistamínicos en gotas, jarabe o tabletas, como por ejemplo, jarabe de Erius o Claritin para niños de 2 o Zirtek gotas para un bebé de seis meses.
Si la alergia se desarrolla muy rápido y la condición del niño empeora, se debe llevar al niño inmediatamente a un centro de salud o llamar a la ambulancia. En caso de edema de Quincke, se recomienda aplicar una compresa fría en el área afectada, para que la inflamación no aumente, mientras se espera por la atención médica.