Alergia a la fórmula infantil

La alergia alimentaria es frecuente en el primer año del niño. Su manifestación es realmente impactante, lo que origina que la madre busque causas y comience el tratamiento, se observan erupciones en la piel.

¿Cómo se manifiesta y cómo se ve?

Los síntomas de las alergias alimentarias en los bebés incluyen:

  1. Erupciones en la piel. El sarpullido puede cubrir el cuello, los antebrazos, el cuero cabelludo, la piel detrás de las orejas, alrededor de la boca y otras áreas. Por lo general, tales erupciones son rojas y brillantes, algunas están cubiertas de costra. También pueden verse como manchas o pápulas inflamatorias y originar comezón. Tales pápulas pueden aparecer en la espalda, las nalgas, las piernas, los genitales, las mejillas y otras áreas. El picor constante de una erupción semejante ocasiona que las lesiones se vuelvan acuosas e irritables.
  2. Dificultad para respirar. Una alergia en un bebé puede manifestarse como secreción nasal, tos y dificultad para respirar. Ésta, se considera muy peligrosa, ya que el bebé no controla la respiración adecuadamente y con la nariz obstruida no podría espirar y comer al mismo tiempo.
  3. Trastorno de digestión. Se presenta regurgitación, ataques de vómitos, hinchazón abdominal, estreñimiento o diarrea. A diferencia de las infecciones virales, que se manifiestan de la misma manera, con una reacción alérgica, la temperatura corporal podría elevarse al presentar estos síntomas de indigestión.

¿Cuánto tiempo tarda en manifestarse?

Las primeras manifestaciones de una reacción alérgica a la mezcla en muchos niños se pueden observar casi inmediatamente después de la alimentación, después de 30-120 minutos. En general, los síntomas de alergia aparecen dentro de las 24-48 horas después de que el alérgeno ingresa al cuerpo del bebé.

¿Qué puede ocasionar una alergia?

Los alérgenos alimentarios con los que el organismo del bebé reacciona, a menudo en el primer año de su vida, son las proteínas de la leche de vaca. Seguidamente, la aparición de reacciones alérgicas en respuesta a la alimentación, es debido a que la leche de vaca es la base de la mayoría de las mezclas de fórmula infantil.

El principal motivo de las alergias alimentarias en niños menores de un año es la predisposición hereditaria (alergias en los padres).

Entre los factores que predisponen las alergias en los niños pequeños también se encuentran:

  • Mayor permeabilidad de moléculas grandes en las membranas gastrointestinales.
  • Menor actividad enzimática.
  • No se ha desarrollado una microflora intestinal normal.
  • Secreción insuficiente de inmunoglobulinas.

¿Qué debería hacer?

La primera acción de los padres al encontrar una erupción en el niño debe ser una consulta con el pediatra para asegurarse de que la erupción realmente tenga una causa alérgica. El médico podrá descartar la posibilidad de dermatitis de contacto, reacciones a medicamentos, infusiones de hierbas, alimentos complementarios y otras fuentes. Solo después de un correcto análisis, puede argumentarse que la causa de la alergia fue por ingerir fórmula infantil.

Otras acciones dependerán de la gravedad de las reacciones alérgicas en el bebé:

  • Si el bebé presenta erupciones en la piel y además tiene regurgitación y exceso de peso, reduzca la cantidad de la mezcla dada o su concentración (la mezcla se diluye para que el bebé pueda digerir mejor y reducir los procesos de fermentación en el tracto digestivo).
  • Si el bebé presenta una cantidad moderada o muy leve de sarpullido, puede tratar de reemplazar la mezcla con una mezcla de leche cabra o adaptada con probióticos y prebióticos. Tal alimento será un estímulo para el desarrollo de la flora de ácido láctico en el intestino.
  • Si las opciones anteriores no dan un efecto positivo, o el bebé tiene una erupción muy fuerte, entonces excluya el alérgeno (proteínas de la leche de vaca). La exclusión abarca también mezclas basadas en leche de cabra, soja o proteínas de leche de vaca divididas.

Pasos para tratar las alergias

Los principales pasos para tratar las alergias son:

  1. Detectar de alérgeno.
  2. Excluir el contacto con el mismo.

Por otra parte, también debería aliviar las síntomas de una reacción alérgica. Si se trata de un problema con la piel, se debe descartar, proceso de descamación y resequedad en la piel. Si el bebé tiene secreción nasal, las fosas nasales deben limpiarse adecuadamente. Si el bebé tiene dificultad para respirar, hay un trastorno digestivo o urticaria, es necesario acudir a un médico. En casos más complicados, los niños deben ser hospitalizados.

Reemplazando la fórmula infantil

Una de las alternativas preferidas a la mezcla convencional son los productos a base de leche de cabra. Sus proteínas son de alto grado y tienen el mismo valor nutricional que las proteínas lácteas de la vaca. Sin embargo, su composición es diferente, por lo que se consideran menos alergénicos.

La segunda opción para cambiar la mezcla es alimentar a los bebes con mezclas de soya. Incluyen proteínas vegetales, a pesar de que su valor nutricional es menor y dificulta más la digestión. Se recomienda a niños mayores de seis meses y solo por un período corto. Además, las proteínas de soja también son a menudo alérgenos.

La tercera y más frecuente opción para cambiar la mezcla (seleccionada según cada niño) son las mezclas hipoalergénicas . Los describimos en detalle en otro artículo. Las proteínas en tales mezclas de leche se descomponen total o parcialmente. Se pueden agrupa en dos tipos: preventivas (en ellas, las proteínas se hidrolizan solo parcialmente) y medicinales. Las preventivas se recomiendan en niños que tengan un riesgo de alergia, y las medicinales para aquellos que ya han desarrollado alergia.

El reemplazo de la fórmula infantil para el bebé se debe llevar a cabo gradualmente durante un mínimo de tres a cinco días (lo recomendable es en un plazo de dos semanas). Esto aplica incluso en el caso de una alergia, porque el bebé requiere acostumbrarse a una nueva alimentación. Si hace el cambio de alimentación en el bebé inmediatamente, puede presentar problemas digestivos y rechazo del bebé para ingerir la nueva mezcla.

Alergia a la mezcla hipoalergénica

El efecto después del reemplazo a una mezcla hipoalergénica (incluye mejora de la piel, normalización de las heces, entre otros) se puede observar solo después de un tiempo. Por lo tanto, es posible evaluar el efecto de la mezcla medicinal solo después de 2-4 semanas.

Las mezclas hipoalergénicas también pueden causar alergias en el bebé, ya que muchas de ellas contienen proteínas de leche de vaca (incluso si están divididas), así como también lactosa. Si el médico ha determinado que la mezcla preventiva prescrita para el bebé es HA (las reacciones a menudo aparecen en ellas, ya que las proteínas en tales mezclas no están completamente divididas), el bebé también presentará alergia, entonces se recomendará cambiar la ingesta del bebé a una mezcla terapéutica de GA.

El pediátra debe ser el único que tome la decisión de cambiar a mezclas terapéuticas.

Con alimentación mixta: Una transición completa a la leche materna

La leche materna no causa reacciones alérgicas y es objetivamente mejor que cualquier mezcla, incluso la hipoalergénica. Es por ello, que cuando el bebé en la alimentación mixta presenta una alergia alimentaria, se recomienda abandonar la fuente de leche de vaca, dejando solo la leche materna en la dieta del bebé.

El regreso a la lactancia materna debe ser gradual, luego la lactancia culminará progresivamente y podrá garantizar que el bebé esté completamente nutrido.