¿Qué pasa si se encuentra cristales de sal en la orina durante el embarazo?

La aparición de varios cristales de sal en el sedimento de orina durante el embarazo es bastante común. En muchas mujeres embarazadas, esta condición causa preocupación. Este artículo ayudará a entender a las madres las peculiaridades de la aparición de sales en la orina durante el embarazo.

¿Qué significa esto?

La sal es un aditivo usado para potenciar sabores en las comidas. Sin embargo, es muy importante controlar su consumo durante el embarazo puesto que puede causar algunas condiciones desfavorables a la salud. Los indicadores normales en el análisis de la orina son muy importantes durante el embarazo. Los médicos prescriben este estudio a las futuras madres varias veces durante todo el periodo del embarazo.

Es un estudio muy sencillo, pero se suma importancia, por lo que permite ser utilizado para diagnosticar una variedad de condiciones patológicas, que pueden indicar un problema tanto en la madre como en su bebé.

La ingesta de sal se relaciona con la retención de líquido y la aparición de edemas, sobre todo en el último trimestre del embarazo. La presencia de las sales en el análisis de orina de una mujer embarazada es motivo para asistir a una consulta no programada con su ginecólogo. Normalmente, varios cristales de sal pueden caer periódicamente en el sedimento urinario, pero no deben acumularse. El sodio regula el equilibrio del agua en el organismo y constituye el 90% del peso total del feto. El organismo tiene diseñados sistemas específicos para controlar su equilibrio, y que estos se mantengan en niveles saludables. El aumento de estos indicadores sobre lo normal, indica que ciertas alteraciones ocurren en el cuerpo de la futura madre.

Causas

La presencia de cristales de sal en el sedimento urinario puede ser causada por una variedad de factores, que afectan a la futura madre, incluso al punto de desarrollar diversas enfermedades del riñón o del tracto urinario.

Durante el embarazo, tales enfermedades son particularmente delicadas, ya que los riesgos no solo afectan a la futura mama, sino que también puede verse afectada la salud del bebé.

Causas:

  • El cambio en la dieta. Es una razón común para la presencia de cristales de sal en el sedimento urinario de una mujer embarazada. Existe la creencia de que las mujeres embarazadas sienten una gran ansiedad por los alimentos salados. El aumento en la ingesta de este condimento contribuye a la alteración de los procesos metabólicos en el cuerpo de la futura madre, lo que puede producir la precipitación de cristales en el sedimento de la orina.
  • Las futuras madres que viven en regiones deficientes de magnesio también pueden experimentar trastornos metabólicos. En este caso, el equilibrio magnesio-calcio se ve perjudicado significativamente. Al final, esta situación contribuye a la aparición de cristales específicos de sales en la orina.
  • El consumo de complejos multivitamínicos seleccionados incorrectamente, pueden producir trastornos metabólicos, dada la ingesta inadecuada de vitaminas y oligoelemento esenciales. La composición de algunos complejos multivitamínicos puede no ser la recomendada para mujeres en periodo de gestación, o presenta alguna enfermedad crónica.
  • La presencia de una predisposición familiar a la formación de varios cristales en el sedimento urinario también puede provocar el desarrollo de cambios específicos en la mujer embarazada. En este caso, incluso antes del embarazo, se han manifestado alteraciones similares, la propensión a la precipitación de cristales en el sedimento urinario, que también se evidencian parientes cercanos a la mujer embarazada.
  • En algunos casos, cambios específicos en la los hallazgos del análisis de orina simple, puede ser producto de un gran consumo de diversas frutas y verduras. Los más "peligrosos" en esta situación son las frutas ricas en ácido oxálico. Como por ejemplo: las semillas de amapola, el amaranto, la espinaca, la acelga, la remolacha, el cacao, el chocolate, la mayoría de las nueces, la mayoría de las bayas, y los frijoles, entre otros.  El uso excesivo de ellos conduce al hecho de que en la orina de las mujeres embarazadas existan cristales específicos de sales.

Tipos de sales

Los cristales de sal pueden ser muy diferentes.

Fosfatos

Muy a menudo en una mujer embarazada, el fosfato aparece en el sedimento urinario. Esta condición se llama fosfaturia. Por lo tanto, el pH de la orina se vuelve alcalino, normalmente, la orina es ligeramente ácida.

Los fosfatos en el sedimento urinario pueden encontrarse por diversas razones, entre ellas la enfermedad renal y en la mayor parte de los casos, la fosfaturia es sintomática y generada por trastornos en la dieta diaria.

El uso excesivo de productos lácteos fermentados, especialmente antes de realizar una prueba general de orina, conduce a la aparición de fosfatos.

La aparición de cristales también es producida por la ingesta frecuente de cualquier fruta y verdura, especialmente de color verde, por la alcalinización persistente de la orina. Después de un tiempo, esta condición contribuye a la aparición en el sedimento de la orina de cristales de fosfato.

La acumulación de fosfatos amorfos en el sedimento urinario ocasiona que la orina se vuelva turbia. La prolongación de este síntoma, puede desencadenar en la formación de cálculos que son una condición más peligrosa, y que se manifiesta con dolor en la parte inferior de la espalda, así como por el desarrollo de otros síntomas desfavorables.

La presencia de cristales de sal  en la orina, además de evidenciar patologías en los riñones y sistema urinario, puede ser consecuencia de infecciones transferidas y otras enfermedades crónicas del tracto gastrointestinal, o diabetes mellitus.

En algunos casos, el aumento en los cristales de sal también puede ocurrir durante la toxicosis grave. En esta situación, las manifestaciones adversas se presentan, como regla, durante el primer y segundo trimestre del embarazo.

Oxalatos

Este es un cristal de sal que puede aparecer con bastante frecuencia. La mayoría de las veces están presentes en la orina de las embarazadas que consumen muchos alimentos de tipo vegetal.

Las futuras madres que son vegetarianas, también corren el riesgo de desarrollar una determinada afección. La precipitación prolongada de oxalatos de calcio en el sedimento urinario puede causar la formación de cálculos renales.

Urato

El mayor contenido de sales de urato ocurre, por regla general, con el abuso en la ingesta de café. Además, el desarrollo de esta condición se puede producir por el consumo excesivo de hongos y productos cárnicos, que pueden generar desequilibrios metabólicos, que se manifiestan por la aparición de cristales de urato en la orina.

¿Qué hacer cuando aparecen cristales de sal en la orina?

En primer lugar, las futuras madres deben comprender que la aparición de un nivel elevado de diversas sales en la orina todavía no es un diagnóstico. Este estado es en la mayoría de los casos temporal. Después de ajustar la dieta o tratar las enfermedades relacionadas que causaron esta afección, estos cambios desaparecen por completo.

Cuando el análisis general de orina arroja el hallazgo de cristales de sal en la orina, la futura madre debe ir inmediatamente a su ginecólogo. El médico evaluará su estado de salud y realizará el examen clínico necesario.

Para descartar la patología de los riñones y el tracto urinario en algunos casos, es obligatorio realizar una serie de pruebas adicionales y ultrasonido.

Durante la revisión, el médico necesariamente evalúa todas las causas posibles que pueden causar estas manifestaciones. Las futuras madres con enfermedades crónicas de los riñones y vías urinarias antes del inicio del embarazo, también necesariamente deben ser observadas con el urólogo.

Recomendaciones para mujeres embarazadas:

  • La observancia del régimen de consumo, es muy importante para la normalización de los indicadores de la orina. En cada caso, la cantidad de líquido a consumir por día varía. Una mujer embarazada que tiene una fuerte propensión a desarrollar hinchazón o toxicosis no debe beber tanta agua, todo lo contrario para una mujer embarazada saludable el cual debe consumir abundante líquido. Por lo general, los parámetros del régimen de bebida los determina el médico durante la consulta.
  • La actividad física también es necesaria para mantener el metabolismo activo. Para las futuras madres, caminar al menos 40-50 minutos por día es ideal y tiene un efecto beneficioso tanto para el organismo de la madre como para su futuro bebé.
  • En algunos casos, los médicos pueden recomendar el uso de ciertos diuréticos naturales como la hoja de cowberry o gayuba (arándalo), que son beneficiosas para mujeres que hayan manifestado edema.
  • Evitar el estrés es muy importante para mantener un metabolismo activo. El funcionamiento normal del sistema nervioso le permite superar con facilidad  las molestias que pueda experimentar durante el embarazo. Para el buen trabajo de los órganos internos, incluidos los riñones, la futura madre no debería estar nerviosa ni preocuparse por insignificancias.
  • La prescripción de medicamentos debe acatarse estrictamente de acuerdo con las indicaciones médicas. Usualmente, los médicos intentan limitar el uso de cualquier medicamento tanto como sea posible, ya que muchos de estos fármacos pueden tener un efecto adverso en el feto y solo prescribir los que sean necesarios para controlar o contrarrestar condiciones crónicas o relacionadas al embarazo.

Dieta

La nutrición adecuada durante el embarazo, es fundamental para el correcto equilibrio de la salud de la futura madre, incluido por su puesto el  funcionamiento óptimo de los riñones y el tracto urinario. Las mujeres embarazadas deben, limitar la ingesta de café y té oscuro. Asimismo no abusar de vegetales y frutas, puesto que el exceso puede causar desequilibrios.

Asimismo durante el verano, es importante observar cuidadosamente la dieta, y preservar un equilibrio entre la ingesta de frutas y vegetales en relación a complejos multivitamínicos para no alterar el equilibrio del metabolismo que puedan provocar una aparición de diversos trastornos urinarios.

Para un buen desarrollo del embarazo, la futura madres no debe exceder el consumo de vitaminas y microelementos.

La ingesta de productos lácteos durante el embarazo es necesaria. Sin embargo el exceso de su consumo a menudo contribuye a un cambio en el pH de la orina, que finalmente provoca trastornos urinarios. 1-2 porciones de productos de lácteos ayudan a prevenir alteraciones del metabolismo del calcio.

La información sobre el análisis general de la orina durante el embarazo se puede encontrar en el siguiente video.