Verrugas en los niños
Las enfermedades de la piel en un niño pueden causar un verdadero shock en la madre, porque tales enfermedades se pueden observar a simple vista y son muy desagradables. Las verrugas más comunes pueden ocurrir en diferentes lugares y a cualquier edad. Haga frente a las verrugas desde su casa. En el siguiente artículo, le explicaremos que puede hacer al respecto.
Causas de su aparición
En la infancia, muchas personas creían que le podía salir o desarrollar verrugas si tocaba un sapo o se lavaba las manos en un charco. Estas acciones por supuesto, no pueden en absoluto causar infección por verrugas. Los científicos han determinado que esta enfermedad de la piel tiene un origen viral.
Se concluyó que el causante de la aparición de verrugas, es el virus del papiloma humano. En la actualidad, hay varias docenas de subespecies diferentes de este microorganismo. Diferentes virus pueden causar muchas variedades de verrugas que difieren significativamente en apariencia unas de otras.
Después de la penetración del virus papilomatoso en el cuerpo de los niños, se disemina rápidamente en el flujo sanguíneo. Estos microorganismos patógenos tienen un efecto negativo sobre las células epiteliales. Los virus, que se establecen en las células epiteliales, pueden permanecer allí durante bastante tiempo. Si no hay tratamiento, entonces causan un crecimiento rápido y el desarrollo de verrugas en un futuro cercano.
Las verrugas de los niños no son fáciles de tratar, pero aún así, se pueden eliminar con terapia. Para despejar completamente la piel de verrugas, debe tener mucha paciencia ya que es un proceso que requiere largo tiempo.
¿Cómo ocurre la infección?
A menudo, los niños se infectan por contacto en el hogar, o por ejemplo, jugando con juguetes comunes en el jardín de infantes. No siempre la fuente de infección será un niño con verrugas en el cuerpo. A menudo, el virus del papiloma humano puede manifestarse levemente o incluso presentar brotes y manifestaciones de forma latente. Incluso las verrugas pequeñas pueden convertirse en una fuente de infección.
Los casos de infección con el virus del papiloma humano son muy comunes. Esto se debe a una poca o falta de higiene personal. La forma más frecuente de infección es el uso de las mismas toallas por todos los miembros de la familia. Los virus se conservan y proliferan perfectamente en las habitaciones cálidas y húmedas, especialmente en los baños, cuando entran en contacto con la piel se infecta fácilmente.
El uso de cubiertos comunes también contribuye a la infección. Los virus se acumulan en la saliva y pueden permanecer viables en todo el ambiente externo. Si las tazas o los cubiertos no se limpian adecuadamente, también se contaminan y contribuyen en la proliferación de la enfermedad.
Otra forma común de infección es la vía transplacentaria. En este caso, mientras aún está en el útero, el futuro bebé puede infectarse. En algunas situaciones, un niño puede infectarse en el momento del parto. Esto ocurre cuando durante el embarazo, surgen diversas patologías de gestación.
El tema de la aparición de las verrugas en los niños será tratado y explicado por el Dr. Komarovsky en el siguiente video.
¿Qué contribuye a la aparición de las verrugas?
Incluso en presencia de una infección papilomatosa en el cuerpo, la aparición de verrugas en la piel no ocurre en todos los pacientes. Durante mucho tiempo, el niño infectado permanece absolutamente saludable. Al mismo tiempo, es prácticamente imposible identificar a estos niños, si no se presentan o existen manifestaciones en la piel.
Los factores más comunes que contribuyen a la aparición de las verrugas son:
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Fuerte disminución de la capacidad inmunológica.
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Encontrarse en situaciones psicotraumáticas o estrés.
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No seguir las reglas de higiene personal.
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Enfermedades crónicas del sistema digestivo, así como enfermedades endocrinas.
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Nutrición inadecuada, falta de vitaminas A, D y E.
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Traumas de la integridad de la piel como resultado de enfermedades crónicas de la piel. Por ejemplo, en áreas muy finas de la piel: Una herida en una superficie delgada de la piel, promueve una infección rápida con el virus como principal causante de las enfermedades cutáneas.
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Sequedad severa de la piel, que conduce a traumatismos y heridas frecuentes.
Tipos
Las verrugas pueden aparecer a diferentes edades. Sin embargo, son muy raras las apariciones en recién nacidos. En un niño de un año, la capacidad inmunológica está formada por las inmunoglobulinas G generadas en la madre, que ingresan al organismo de los niños durante la lactancia. Esta es la causa de un menor número de casos en bebés.
Las verrugas pueden aparecer en casi todas las partes del cuerpo. La localización también determina el curso y las características del desarrollo de la enfermedad. El número de verrugas puede ser de algunas piezas a docenas. Depende del subtipo del virus que causó su aparición, así como de la edad del bebé y el estado inicial del sistema inmunitario.
Por tipo y ubicación, todas las verrugas se dividen en varios grupos:
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Plantar. Aparece en el pie. El proceso puede ser unidireccional o bidireccional. Usualmente, tales verrugas son pequeñas, de hasta 5-7 mm. A menudo tienen un color oscuro con pequeñas hendiduras en el centro. Las verrugas son muy profundas en la piel. Con gran tamaño o localización en el talón que puede causar dolor severo al caminar.
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Herpes Simple. Pueden aparecer en las manos, en la cara, así como en la frente y en la nariz. Estas verrugas parecen nódulos separados. Puede ser de diferentes tamaños: De un par de milímetros a un centímetro. Como característica general, son planas. También puede aparecer en los codos y en la parte posterior del brazo. En algunos casos, incluso en las rodilla.
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Paroniquia. Aparece en el dedo, alrededor de la uña. A menudo parece sobresalir por encima del nivel de formación de la piel. Puede ser de color marrón o gris.
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Herpes zóster. A menudo son numerosos. Aparecen en gran cantidad, en las piernas y en las palmas presentando un aumento casi insignificante por encima de las áreas saludables de la piel.
¿Cuál es su apariencia?
Las verrugas aparecen en los niños pequeños a diferentes edades. Incluso un niño de un año puede presentar signos de poseer una infección papilomatosa. La apariencia de las verrugas depende del subtipo del virus que las causó. Por lo general, parecen aplastarse o elevarse sobre la superficie de la piel.
En la mayoría de los casos, varias verrugas aparecen en la piel a la vez. Tienen un color marrón oscuro o incluso negro. A veces son de color rosa pálido que recuerdan las áreas sanas de la piel. En este caso, solo un dermatólogo puede distinguir la verruga de cualquier tipo de enfermedad cutánea.
El tamaño de las verrugas es de 2-3 mm a 1 cm. Muy a menudo la infección se manifiesta por numerosas erupciones. En este caso, primero aparece una verruga, y después de un tiempo, su número aumenta. Básicamente, esto sucede en los casos en que no se inicia tratamiento o el niño tiene trastornos pronunciados en el sistema inmunológico.
¿A quién recurrir?
Si se manifiestan los primeros signos de la enfermedad, se debe llevar al niño a un dermatólogo. El médico realizará todas las pruebas y exámenes necesarios, de esta manera podrá decir exactamente si el niño tiene una infección papilomatosa. Actualmente, una gran variedad de estudios se utilizan para determinar la presencia del virus en el cuerpo.
Para determinar qué subtipo del virus causó la enfermedad, realice pruebas de laboratorio. El material para la investigación puede ser sangre o una muestra de piel afectada por la enfermedad. Por lo general, para investigar tal biopsia, el médico envía una pieza de la verruga al examen histológico. El médico-histólogo brinda una descripción detallada y realiza el diagnóstico final.
Las erupciones o protuberancias en la piel no siempre llegan a ser verrugas. De modo que varias enfermedades dermatológicas pueden manifiestarse a la vez, incluida una infección menor que la papilomatosa. En varios casos, las verrugas están enmascaradas por lesiones fúngicas. En tal situación, sin un examen histológico, será difícil para los médicos realizar un diagnóstico correcto.
Tratamiento
En la actualidad existen muchos métodos que pueden curar las verrugas. Entre ellos, los métodos de la medicina tradicional, que se han utilizado ampliamente durante muchas décadas, y las modernas técnicas de fisioterapia con medicamentos. Estos métodos terapéuticos de tratamiento de las verrugas pueden hacerle frente con éxito a esta enfermedad desagradable en los niños pequeños.
Cada uno de estos métodos tiene sus propiedades positivas y negativas. Algunas madres consideran que algúno de estos métodos de tratamiento es una auténtica panacea en el tratamiento de las verrugas, y otras señalan que no ayudan en lo absoluto. Esto se debe a que en el mundo existe una gran cantidad de virus de papiloma humano. El tratamiento en este caso, debe seleccionarse de forma estrictamente individual.
Para saber cómo deshacerse efectivamente de las verrugas, vea el siguiente video.
Hay varias maneras de eliminar una verruga en casa:
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Tratamiento con celidonia. El jugo de esta planta tiene un efecto nocivo sobre el virus del papiloma humano. Con el tratamiento regular de jugo de celidonia, puede limpiar la piel del bebé de las verrugas. Tenga en cuenta que este método se puede utilizar si el niño no presenta alergias a esta planta. Antes de usar en la piel, verifique si una reacción alérgica probando el tratamiento con celidonia primero en un área pequeña.
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Tratamiento con ácido acético. Para cauterizar, diluya ácido acética o vinagre de alimentos, en agua. Usando un hisopo de algodón, se aplica vinagre a la superficie de la verruga. Esta reacción química causa una pequeña quemadura. Con el tratamiento regular con ácido acético, puede lograr un buen resultado.
Gracias a los remedios caseros, es posible eliminar los síntomas adversos de casi todos los casos de esta enfermedad. Como norma, eliminan con éxito pequeñas verrugas. Sin embargo, si las erupciones en la piel son muchas, no se podrán eliminar por completo si no se utilizan medicamentos especiales y métodos de fisioterapia.
Para el tratamiento de las verrugas en la medicina moderna se utilizan:
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Remedios especiales que causan una quemadura química en la superficie de la piel. Esto le permite eliminar el virus del papiloma humano, que causa la aparición de las verrugas. Para tales fines, puede utilizar "Ferezol", "Superchistotel", "Duofilm". Use estos medicamentos con gran cuidado. El uso indiscriminado puede causar quemaduras graves en la piel, lo que dará lugar a la formación de cicatrices.
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Tratamiento de áreas afectadas con ungüentos y soluciones antivirales. Tales medicamentos causan la muerte del virus, lo que ayuda a limpiar la piel de las verrugas más adelante. Pueden incluir pomadas de oxolínica o tebrofina. Se usan hasta la eliminación de los síntomas adversos. Por lo general, se produce un efecto positivo después de un par de semanas de uso.
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Criodestrucción. En este caso, las verrugas se tratan con nitrógeno líquido. Es mejor que tal manipulación sea realizada por un dermatólogo experimentado. Esto ayudará a reducir el riesgo de posibles complicaciones debido a técnicas y procedimientos incorrectos. Con la ayuda de nitrógeno líquido, se tratan todas las verrugas que aparecieron en la piel. Este método es bastante doloroso, sin embargo, tiene un buen efecto. La mayoría de los niños no tiene nuevas apariciones de verrugas después de la criodestrucción.
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Terapia con láser. El uso de radiación láser puede eliminar la piel dañada o con verrugas. Este procedimiento permite que el láser penetre en la piel a una profundidad suficiente. Incluso las verrugas que penetran profundamente en las capas de la piel son ideales para dicha eliminación. En general, se eliminan por completo. Solo en el 5-10% de los casos pueden aparecer nuevas verrugas como resultado de recaídas.
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Aplicación de tratamiento quirúrgico. Con la aparición de verrugas masivas, en varios casos, los médicos pueden recurrir a una pequeña extirpación de lesiones cutáneas a tráves de una intervención quirúrgica. Este método de tratamiento se usa muy raramente.
Consecuencias
Por lo general, las verrugas no tienen consecuencias graves para la salud del niño.
Sin embargo, después de eliminarlas con la ayuda de los diferentes métodos de tratamiento químico o fisioterapéutico, las cicatrices antiestéticas pueden permanecer en la piel.
Si aparecen verrugas en la cara, son especialmente desfavorables. En las niñas, tales defectos conllevan una fuerte y pronunciada incomodidad. En tales casos, se requiere una consulta de un cosmetólogo y una amplia gama de procedimientos para la eliminación de cicatrices.
Cuando las verrugas se localizan en el área de pliegues de la piel, a menudo aparecen lesiones, aumentando el riesgo de un posible trauma. En este caso, hay un ligero sangrado. En la herida puede producirse una infección bacteriana secundaria que lleva a la aparición de supuración. En este caso, el tratamiento requiere la administración de antibióticos que contribuyen a la eliminación de la inflamación bacteriana en todas las capas de la piel.
El tratamiento de las verrugas en bebés menores de tres años puede ser bastante doloroso. La piel de un niño a esta edad es muy sensible a los diferentes métodos de tratamiento. Incluso el uso de soluciones y medicamentos con una pequeña concentración de agentes activos, puede causar una reacción alérgica fuerte en el bebé o una quemadura química grave. En este sentido, los médicos no recomiendan el tratamiento de las verrugas en el hogar en niños menores de tres años y recién nacidos.
Prevención
Toda madre quiere prevenir la aparición de las verrugas. La prevención de tales enfermedades puede ser de gran beneficio. Después de todo, el tratamiento de las verrugas es una preocupación y puede convertirse en una situación muy problemática. A menudo, no se pueden eliminar la primera vez. Pero incluso con la desaparición completa de las verrugas después de un tiempo, pueden aparecer recaídas de esta enfermedad. Depende del nivel de inmunidad que tendrá el niño en el futuro.
Para no infectarse con el virus del papiloma humano, uno debe seguir los siguientes consejos:
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Siga las normas de higiene personal. Cada miembro de la familia necesita tener un juego de toallas y ropa de cama. Se deben lavar regularmente en agua caliente con detergente, y planchar en ambos lados con una plancha caliente. Tal procesamiento de estos textiles puede reducir el riesgo de una posible infección dentro de la familia.
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El niño debe tener sus propios cubiertos y utensilios. Si hay varios niños en la familia, cada niño debe tener el suyo. Usar los platos de otra persona puede provocar una infección.
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Evite el contacto de los bebés con verrugas. Si su hijo tiene un nivel de inmunidad bajo o si hay enfermedades crónicas, puede infectarse fácilmente con niños que presenten esta enfermedad. Para minimizar esto, trate de limitar tales contactos, hasta la recuperación total de los bebés con verrugas. Asegúrese que después de venir de la calle o después de la guardería, el bebé se lave cuidadosamente las manos con jabón.
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Fortalezca la inmunidad. Si el niño tiene un sistema inmune fuerte es casi una garantía que el niño no tendrá verrugas incluso, si está infectado con una infección papilomatosa. Para fortalecer la inmunidad, el niño debe necesariamente caminar en la calle activamente en su tiempo libre.
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Nutrición completa, enriquecida con vitaminas y oligoelementos. Esto contribuye al excelente funcionamiento del sistema inmune y previene la infección de cualquier enfermedad, incluido el virus del papiloma humano. Trate de incluir en la dieta de los niños, muchas frutas frescas, bayas y vegetales. Contienen una gran cantidad de vitaminas y microelementos naturales, útiles para el organismo de los niños.
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Cumplimiento del régimen del día y descanso. Las fuertes cargas psicoemocionales contribuyen a la activación de la infección viral y al resurgimiento de las verrugas en la piel. Si un niño se cansa mucho en la escuela o después de una sesión de deportes, asegúrese de revisar tales esfuerzos. El agotamiento del cuerpo puede interrumpir el trabajo del sistema inmune y provocar la aparición de la enfermedad.
Tratar las verrugas en un niño es una tarea bastante difícil y problemática. La prevención de la enfermedad es mucho más fácil que hacer frente a la eliminación de estos crecimientos y erupciones desagradables que aparecen en la piel.
Cumplir con todas las normas de higiene personal, puede reducir significativamente el riesgo de una posible infección e incluso prevenir la aparición de verrugas en el niño.