El primer trimestre del embarazo: ¿Cómo se desarrolla el feto durante la 11° semana?

El primer trimestre del embarazo siempre será uno de los más importantes, porque es el momento donde se evidenciarán cambios en el feto y en el cuerpo de la madre. ¡Sigue leyendo y conoce paso a paso cómo es esta evolución!

Durante el primer trimestre del embarazo, casi al final de la semana 11 es cuando la mujer debe cuidar más de su cuerpo. Lo más importante es la gestación del embrión, el cual estará en constante desarrollo: formación de la cabeza, brazos, manos, las células nerviosas... En este proceso no solo se reflejarán cambios en el bebé sino también existirán cambios en la madre, donde experimentará nuevas sensaciones. Muchas sufren de naúseas o presentan antojos, además el tamaño de las mamas aumentan al mismo tiempo que poco a poco durante los nueve meses va creciendo el abdomen. 

En esta etapa de su vida intrauterina, el feto se encuentra rodeado de líquido amniótico y el bebé comenzará a abrir y cerrar la boca. Muchas madres pueden pensar que el bebé se puede ahogar con el líquido amniótico, pero lo que no saben es que esta característica es necesaria para su desarrollo, ya que la ingestión de líquido ayudará para la formación del sistema excretor, ayudando al niño a orinar solo. Durante este periodo el niño continúa formándose y fortaleciéndose, sobre todo la estructura ósea, por eso es importante que la madre tome suficiente calcio, podría ser mediante suplementos o incluyendo en su dieta diaria productos lácteos. 

En el transcurso de estas semanas el bebé ya está desarrollando su sistema nervioso, por lo que ya comienza a escuchar y sentir, todo esto contribuye a que la conexión entre la madre y el niño sea más fuerte. Es necesario que la madre se encuentre en un estado de ánimo positivo y tranquilo durante el embarazo, ya que ella puede transmitir todos estos sentimientos al bebé, si ella está constantemente agitada puede afectar de manera negativa al niño.

Los niños en la etapa fetal comienzan a conocerse a sí mismos, el movimiento del futuro bebé a lo largo de estas semanas suele ser intenso, pueden tocar sus caras, mover sus bracitos y piernas, doblar sus dedos, pueden sonreír o hacer muecas, etc. Toda esta movilidad expresa que está vivo y que todo evoluciona correctamente. También el hígado, el páncreas y el intestino del feto comienzan a funcionar gradualmente y se van produciendo los primeros procesos metabólicos.  

En este momento del embarazo el desarrollo intrauterino presenta características interesantes, por ejemplo, su cuerpo crece un poco más rápido que la cabeza y ya tiene dedos pequeños, aunque sus pulgares son algo diferentes en forma y en tamaño que los demás. Cada día que pasa la estructura de su cuerpo se va formando y mejorando, también el cerebro del feto se desarrolla activamente, además las hormonas ya comienzan a formarse en la glándula pituitaria, y la cantidad de células nerviosas crecen y se reproducen de manera más rápida. 

A las 11 semanas la conexión entre el sistema nervioso y muscular mejora, por lo tanto los nervios proporcionan el trabajo de los músculos, esto quiere decir que mientras mayor sea la interacción, más movimientos hará el bebé. En estos momentos ya se ha formado casi completamente el diafragma, este músculo es necesario para la separación del tórax y la cavidad abdominal, ya que están involucrados con la respiración. 

En este momento también se forma el sistema inmune del bebé, en el torrente sanguíneo aparecen los primeros linfocitos y eritrocitos, estas células inmunes protegen al cuerpo de diversas infecciones. Otra característica interesante en este periodo es el inicio de la formación del iris, el feto comienza a depositar un pigmento visual que en el futuro determinará el color de sus ojos. La cara y sus características también presentan cambios, se vuelve más alargada y la nariz comienza a tomar una forma más específica.

Es importante saber que en esta edad uterina los genitales del niño y la niña ya tienen diferencias muy claras, por lo que mediante el ultrasonido se podría reconocer el sexo del bebé si la posición lo permite.

El tamaño del feto en 11 semanas de embarazo todavía es muy pequeño, su peso es de aproximadamente 10-12 gramos y la atura es de 6-9 centímetros aproximados. 

Al final del primer trimestre del embarazo, el feto recibe sangre mediante el sistema de flujo sanguíneo que comparte con la madre. Este proceso es necesario para que el bebé obtenga nutrientes y oxígeno para su crecimiento completo. Actualmente el niño cuenta con el sistema cardiovascular y su corazón ya está latiendo. 

El ultrasonido es un método importante de diagnóastico, permite revelar diversas patologías y evaluar el desarrollo del bebé. Durante la ecografía el médico evaluará los signos de enfermedades genéticas y cromosómicas. Es importante llevar a cabo este estudio para mujeres que tienen un historial de enfermedades genéticas familiares e informar a su médico.

También el médico detectará la cantidad de líquido amniótico en la madre, si hay demasiado se le conoce como polihidramnios y si hay poco se le llama oligohidramnios, ambas condiciones son desfavorables para el bebé. En este momento del embarazo la cantidad de líquido amniótico ideal para el desarrollo del bebé es de aproximadamente 30-35ml. Este líquido se asemeja al plasma sanguíneo, el bebé al tragarlo puede sentir su sabor que suele ser salado.

También en este período de embarazo, el experto en ultrasonido necesariamente estima la cantidad de líquido amniótico. Si hay demasiado, entonces en este caso se determinan polihidramnios. Reducir la cantidad de líquido amniótico se llama bajo nivel de agua. Ambas condiciones clínicas son desfavorables para el feto.

En este momento del embarazo, la cantidad de líquido amniótico, suficiente para el desarrollo intrauterino óptimo del feto, es de aproximadamente 30-35 ml. En su composición química, este líquido se asemeja a un plasma sanguíneo. El bebé, tragándolo, puede sentir y su sabor, que a menudo es salado.

El parámetro clínico es el lugar de la unión del bebé y la placenta, el médico a través del ultrasonido examinará cuidadosamente la densidad, el tamaño y los vasos sanguíneos de la placenta. El doctor también estudia el tamaño del útero, en esta etapa del embarazo aún se encuentra en la región pélvica, en el futuro crecerá y aumentará.

Suele suceder que en las mujeres esbeltas el útero agrandado se ve como un pequeño tubérculo que sobresale en la parte inferior del abdomen, a medida que pasen las semanas el vientre de la madre continuará aumentando a medida que el bebé vaya creciendo.