Cartas de los gnomos de Goshi "Te enseñaré a leer" - enseñando al niño a leer en forma lúdica

Enseñar a los niños a amar la lectura es un reto que les generará beneficios toda su vida pero se requiere paciencia y algunos trucos para lograr resultados. Si se quiere facilitar el camino hacia la lectura, la combinación de aprendizaje y juego será infalible. Un fuerte aliado es el método del Gnomo Goshi, que presentará nuevas experiencias a los niños mientras comienzan a familiarizarse con las letras.

La lectura y el juego, importantes aliados

El juego es una actividad cotidiana que contribuye a activar el desarrollo del niño. Por eso, en el aprendizaje de las primeras letras, es importante integrar actividades lúdicas. Si esto se hace frecuentemente y de manera correcta, el niño aprenderá de forma natural y divertida.

Mientras el niño juega, su mente y todos sus sentidos se abren a un mundo de experiencias donde no existe la coacción. Por eso, cada vez que se le ofrezca realizar una actividad en forma de juego, se sentirá altamente motivado. El juego lo ayudará a aprender de forma placentera y los resultados podrán verse pronto dado que este método es más efectivo.

En casi todas las culturas letradas existen juegos para que los niños aprendan a reconocer las letras. Esto los inicia en el camino de formar sílabas y palabras.

El aprendizaje no es igual en la escuela que en el preescolar. Esta etapa posee algunas características que es necesario conocer:

  • Períodos breves. Los niños pequeños prefieren sesiones breves de aprendizaje que combinen la enseñanza con otras actividades. Un niño de 4 años puede trabajar idealmente durante unos 15 minutos, mientras que si tiene 6-7 años, lo mejor será utilizar 25-30 minutos. Es importante realizar diferentes tipos de tareas durante la lección.
  • Reuniones regulares. Las clases deben realizarse en lapsos regulares, con horarios y momentos de descanso bien programados. Esto facilitará que el niño se familiarice con las sesiones de enseñanza.
  • En todo momento y lugar. No existe un sólo sitio para aprender, al contrario, la vida diaria del niño presenta innumerables ocasiones para enseñarle lo necesario. Mientras anda por la calle, acompaña a hacer las compras o ayuda con los quehaceres, se pueden plantear actividades recreativas para que el niño comience a conocer las palabras y a desarrollar su imaginación.
  • Sobre todo, que esté tranquilo. Es necesario que el niño se encuentre cómodo en las sesiones de aprendizaje. No se puede obligarlo a escuchar si tiene hambre, se siente enfermo o está disgustado. Espere a que se sienta bien para comenzar cada sesión.
  • Sea atento y elogie sus progresos. El niño aprenderá más rápido si cada vez que hace algo bien, es elogiado. De esta manera obtendrá un refuerzo positivo, se sentirá bien y retendrá mejor la información.

Existen muchas actividades divertidas que los niños pueden realizar para aprender a leer. Algunos de estos métodos pueden venir de su ingenio, pero también se puede contar con métodos desarrollados y probados por otras personas. Un método para enseñar a leer en forma divertida son las Cartas de los Gnomos de Goshi.

Principales características de este método

Este instrumento de enseñanza está integrado por tres cuadernos, cada uno con su propio nivel de dificultad.

Para usar este método, es necesario que el niño esté iniciado en el conocimiento de las letras y sea capaz de formar sílabas. Cada libro representa un nivel de dificultad y pueden ser usados en orden, del más sencillo al más complicado. Además, es preferible comenzar a partir de los cuatro años de edad.

El juego tiene pocas reglas pero deben ejecutarse con cuidado. Cada nivel posee 30 letras, las cuales deben dejarse bajo la almohada del niño sin que se de cuenta. Cuando el niño encuentre las letras comienza una relación con un amigo mágico: el gnomo Goshi, quien le colocará diferentes tareas y lo premiará con regalos. El juego puede ser presentado de diferentes maneras, por ejemplo, si el niño quiere que le obsequien algo, se le puede poner una prueba del gnomo Goshi para que la resuelva y gane su premio.

Como las cartas son mágicas, solamente pueden ser leídas por los niños. De esta manera, se les motiva para que aprendan a reconocer los símbolos. Los adultos deben fingir que no pueden leer las cartas mientras que, por otro lado, dejan pistas para que el niño pueda memorizar las letras correspondientes. Así, el niño comenzará a motivarse por sí mismo en la dinámica de una divertida fantasía.

Una ventaja de este método es que el niño aprende a su propio ritmo, por lo que no es necesario presionarlo para que resuelva los acertijos todos los días. Además, el esfuerzo es casi imperceptible, porque el juego se integra naturalmente en la rutina cotidiana. Como resultado, el niño comenzará a tener interés por la lectura de forma independiente. Con cada logro, el niño puede recibir una nueva carta, pero sólo en la medida en que vaya demostrando que ha aprendido lo que se espera.

En los primeros niveles, el niño debe aprender a leer palabras y oraciones específicas. Mientras avanza, aparecen algunos textos extensos. Así puede aprender de forma gradual y ajustada a su propio ritmo.

Así mismo, las tareas se vuelven más emocionantes con cada nivel. El niño debe resolver las tareas por su cuenta y no hay forma de hacer trampas. Sin embargo, en el tercer libro se presenta una breve guía de respuestas para los padres. Lo mejor es incentivar al niño para que resuelva las tareas con un mínimo de ayuda para que aprenda a leer de forma envolvente y divertida.

Además, el juego se encuentra bien elaborado, ya que contiene figuras coloridas y decoradas. También se incluye un sobre para dejarlo bajo la almohada del niño y para guardar las respuestas.

Cada sobre está firmado por el gnomo Goshi especialmente para el niño. Esto lo motivará a responder los retos de su amigo mágico, y aprenderá a reconocer las letras casi sin notarlo. Eso sí, recuerde colocar una pequeña recompensa cada vez que el niño muestre un avance en el aprendizaje. 

Lo que incluye el juego

En cada uno de los tres libros encontraremos:

  • 30 cartas escritas por el gnomo Goshi;
  • Calcomanías de la marca;
  • Sobres para las cartas y las respuestas de los retos;
  • Un conjunto de tareas motivadoras para los niños;
  • Una introducción al uso del juego

Algunas personas se preguntan ¿cómo explicar que el niño se separe del enano. La psicóloga Natalia Ustinova habló de este tema en una entrevista, que recomendamos para la lectura.

Comentarios y recomendaciones

Las críticas a la serie de las Cartas del Gnomo Goshi demuestran la aceptación que ha tenido entre los niños y los padres. Éstos agradecen la posibilidad de iniciar a los niños en el aprendizaje a través de un juego que estimula la imaginación. Mientras, los niños se emocionan cuando reciben las cartas y se apresuran a resolver las pruebas, para lo cual piden ayuda a padres y maestros. Así, no es necesario obligarlos a leer porque comienzan a aplicarse por iniciativa propia y, como resultado, leer se convierte en una experiencia positiva para los niños. Este es un regalo que perdurará toda su vida.

Si desea obtener más información sobre esta técnica de enseñanza, por favor acceda al siguiente video.