Heces blancas o claras en un niño
El color de las heces del niño suele ser entre amarillo y marrón, por lo que la aparición de un color más claro puede ser motivo de preocupación. Por lo tanto, es bueno conocer por qué las heces pueden volverse blancas y qué hacer en estos casos.
Causas de las heces blanquecinas
Las heces de color blancuzco pueden ser el resultado de un cambio en la alimentación del niño, pero en algunas ocasiones, son un síntoma de enfermedad del sistema digestivo.
Atención de los recién nacidos
Las heces de los recién nacidos suelen cambiar de color, según el tipo de alimento ingerido. En la etapa de lactancia, cuando la madre comparte su nutrición con el bebé, las heces cambian de apariencia según los alimentos que ella ingiera.
En algunos casos, la ingestión de fórmulas alimenticias puede provocar que las heces del bebé se tornen de un color claro. Esto suele ser temporal y pasa en unos 2 o 3 días. Las heces de color brillante pueden aparecer como resultado de la aplicación de antibióticos en el bebé.
Niños más grandes
En los niños mayores de un año, las heces claras pueden aparecer debido a las siguientes causas:
- Infecciones del sistema digestivo (rotavirus).
- Casos de hepatitis.
- Inflamación del páncreas.
- Problemas de la bilis o lesiones en la vesícula.
- Enfermedad de Whipple. En estos casos las heces presentan espuma y olor fétido.
- Medicamentos que afectan el hígado, como antibióticos y antiinflamatorios.
Frecuencia de aparición
El color de las heces del niño puede modificarse como consecuencia de cambios en la dieta de la madre lactante o del bebé. En el primer caso, es común ver un color anormal a las 10 y 24 horas después de la lactancia. En caso que el bebé haya tomado una fórmula nutricional, el cambio de color puede presentarse por dos o tres días. En niños mayores de 6 meses, la aparición de heces claras puede estar relacionada con la ingestión de complementos alimenticios o con cambios en la dieta.
Un color claro también puede ser consecuencia del exceso de ciertos alimentos ricos en grasas, como la mantequilla. Las heces líquidas pueden ser evidencia de una anomalía en la digestión de alimentos con grasas.
Mocos o sustancias blancas en las heces
La aparición de vetas de color blanco y de aspecto viscoso en las heces del niño puede ser señal de proctitis o fístula del recto, sobre todo si está acompañada de dolor en el ano y fiebre. Si su bebé presenta estos síntomas, no dude en visitar a un médico especialista.
Manchas o bultos blancos
Este tipo de sustancia aparece como consecuencia de la mala digestión de algunos alimentos, especialmente de origen vegetal. En estos casos, pueden aparecer granos o fibras en las heces del niño. Generalmente este tipo de manifestación no es causa de alarma, pero es necesario observar si el niño presenta algún otro síntoma o trastorno.
Gusanos o helmintos
Todos los tipos de gusanos se presentan como manchas o fibras de color blanco y amarillo. Los oxiuros son pequeños gusanos de 3 a 4 milímetros de largo y pueden ser observados. Los gusanos de mayor tamaño pueden ser ascáridos muertos. Si aparecen gusanos en las heces del niño es necesario tomar una muestra para el análisis de laboratorio y solicitar al pediatra un tratamiento contra parásitos.
Otros síntomas: dolor, fiebre y orina oscura
Si el cambio de color de las heces viene acompañado de dolor abdominal, puede tratarse de una inflamación de páncreas.
Si la decoloración ocurrió en muy poco tiempo, y está acompañada de un color oscuro en la orina, fiebre y dolores en el costado derecho, puede haber un caso de colecistitis aguda o hepatitis. Tales síntomas deben tomarse con extremo cuidado y su aparición es motivo para consultar al médico de inmediato.
¿Qué hacer en estos casos?
La primera vez que note heces blanquecinas o amarillentas, manténgase atenta por unos días. Si se normalizan, y no hay cambios en la salud del niño, no necesita preocuparse. Pero si el niño presenta dolores u otros síntomas, es importante recurrir a un médico y realizar exámenes para descartar enfermedades en el sistema digestivo.
¿En qué casos debe consultar a un médico?
Contacte con un médico si encuentra heces muy claras y además se presentan los siguientes síntomas:
- Inflamación notoria.
- Sensación de náuseas y vómitos.
- Fiebre recurrente.
- Dolores abdominales o en los costados.
- Ojos y piel de color amarillo.
- Orina demasiado oscura.
- Pérdida del apetito y disminución de peso.
- Insomnio, debilidad, molestia y otros problemas de conducta.
- Sed persistente
Las heces de los recién nacidos suelen cambiar de color, según el tipo de alimento ingerido. En la etapa de lactancia, cuando la madre comparte su nutrición con el bebé, las heces cambian de apariencia según los alimentos que ella ingiera.
En algunos casos, la ingestión de fórmulas alimenticias puede provocar que las heces del bebé se tornen de un color claro. Esto suele ser temporal y pasa en unos 2 o 3 días. Las heces de color brillante pueden aparecer como resultado de la aplicación de antibióticos en el bebé.
En los niños mayores de un año, las heces claras pueden aparecer debido a las siguientes causas:
- Infecciones del sistema digestivo (rotavirus).
- Casos de hepatitis.
- Inflamación del páncreas.
- Problemas de la bilis o lesiones en la vesícula.
- Enfermedad de Whipple. En estos casos las heces presentan espuma y olor fétido.
- Medicamentos que afectan el hígado, como antibióticos y antiinflamatorios.
Frecuencia de aparición
El color de las heces del niño puede modificarse como consecuencia de cambios en la dieta de la madre lactante o del bebé. En el primer caso, es común ver un color anormal a las 10 y 24 horas después de la lactancia. En caso que el bebé haya tomado una fórmula nutricional, el cambio de color puede presentarse por dos o tres días. En niños mayores de 6 meses, la aparición de heces claras puede estar relacionada con la ingestión de complementos alimenticios o con cambios en la dieta.
Un color claro también puede ser consecuencia del exceso de ciertos alimentos ricos en grasas, como la mantequilla. Las heces líquidas pueden ser evidencia de una anomalía en la digestión de alimentos con grasas.
Mocos o sustancias blancas en las heces
La aparición de vetas de color blanco y de aspecto viscoso en las heces del niño puede ser señal de proctitis o fístula del recto, sobre todo si está acompañada de dolor en el ano y fiebre. Si su bebé presenta estos síntomas, no dude en visitar a un médico especialista.
Manchas o bultos blancos
Este tipo de sustancia aparece como consecuencia de la mala digestión de algunos alimentos, especialmente de origen vegetal. En estos casos, pueden aparecer granos o fibras en las heces del niño. Generalmente este tipo de manifestación no es causa de alarma, pero es necesario observar si el niño presenta algún otro síntoma o trastorno.
Gusanos o helmintos
Todos los tipos de gusanos se presentan como manchas o fibras de color blanco y amarillo. Los oxiuros son pequeños gusanos de 3 a 4 milímetros de largo y pueden ser observados. Los gusanos de mayor tamaño pueden ser ascáridos muertos. Si aparecen gusanos en las heces del niño es necesario tomar una muestra para el análisis de laboratorio y solicitar al pediatra un tratamiento contra parásitos.
Otros síntomas: dolor, fiebre y orina oscura
Si el cambio de color de las heces viene acompañado de dolor abdominal, puede tratarse de una inflamación de páncreas.
Si la decoloración ocurrió en muy poco tiempo, y está acompañada de un color oscuro en la orina, fiebre y dolores en el costado derecho, puede haber un caso de colecistitis aguda o hepatitis. Tales síntomas deben tomarse con extremo cuidado y su aparición es motivo para consultar al médico de inmediato.
¿Qué hacer en estos casos?
La primera vez que note heces blanquecinas o amarillentas, manténgase atenta por unos días. Si se normalizan, y no hay cambios en la salud del niño, no necesita preocuparse. Pero si el niño presenta dolores u otros síntomas, es importante recurrir a un médico y realizar exámenes para descartar enfermedades en el sistema digestivo.
¿En qué casos debe consultar a un médico?
Contacte con un médico si encuentra heces muy claras y además se presentan los siguientes síntomas:
- Inflamación notoria.
- Sensación de náuseas y vómitos.
- Fiebre recurrente.
- Dolores abdominales o en los costados.
- Ojos y piel de color amarillo.
- Orina demasiado oscura.
- Pérdida del apetito y disminución de peso.
- Insomnio, debilidad, molestia y otros problemas de conducta.
- Sed persistente